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lunes, 26 de noviembre de 2012


ALBERTO GARCÍA                                                                                                                                                   PÁRROCO DE SANTOÑA

“La transmisión del alma no tiene nada que ver con lo físico”

Lunes, 26 de Noviembre de 2012

            Don Alberto García es el párroco de la villa de Santoña desde hace años. Antes de iniciarse como cura trabajó en la marina. Mantiene una postura racional y fuera de lo espiritual respecto al tema de la donación de órganos, el cual defiende como un acto a favor de la vida.

¿Qué opina sobre la donación de órganos?
            La donación de órganos es una cosa muy buena, la labor que realizan las asociaciones es algo muy positivo, la medida en que se puede ayudar a cualquiera, a contemplar la vida.

            Yo digo que el ejercicio del hombre en la tierra precisamente es la vida, todos los grandes problemas sobre la existencia y todo lo que favorezca que la vida siga y que sus condiciones se recobren son algo excelente.

¿Qué cree sobre la transmisión del alma por un trasplante?
            Creo que es algo absurdo y que la transmisión del alma no tiene nada que ver con lo físico. Quien dice eso no sabe lo que es el alma. Es algo espiritual que infunde Dios en el hombre, no tiene nada que ver con lo meramente material, lo somático.

            El cuerpo es una realidad somática dotada de inteligencia. Dios imprime en el cuerpo humano en su concepción el alma. Son dos cosas que no tienen nada que ver. Un hígado, un corazón o un pulmón no puede transmitir el alma de nadie.

            Las cosas han cambiado y avanzado mucho, pero antes se hacían los trasplantes de otra manera y si algo salía mal, era inevitable que la persona sintiera algo. Una cosa que está muy clara es que los órganos que se trasplantan no son objeto de sensación. Yo creo que se mezcla lo espiritual con lo físico.

¿Cree que puede haber un sentimiento de culpa al saber que una persona joven y sana ha perdido la vida para que la otra persona viva?
            El planteamiento debería de ser el contrarío, ya que gracias a él esta viviendo. Se hace un gran bien, pero el problema es la disposición con la que se recoja esa ofrenda.

¿Qué opinión tiene sobre la cláusula que prohíbe la procedencia del órgano?
            Creo que está bien por muchos motivos. Desde el más elemental de la intimidad del donante. Pienso que no siempre se debe saber todo, hay cosas que es mejor no saber.

Hay padres o familiares cuyos hijos han donado órganos y quieren saber quién ha sido el receptor ¿Qué cree al respecto?
            Conozco poco al respecto, pero he oído hablar de ello. Se puede dar un “sentimentalismo”, sin el sentido peyorativo de la palabra, y un “querer conocerlo” que creo que es como buscar la compensación por lo que se ha hecho. Pero esto no siempre viene bien.

            A veces solo se quiere compensar al que ha hecho bien. Aquí sí que tiene que haber una entrega absolutamente generosa. Puede que se quiera buscar una compensación y no el bien objetivo de la persona. Por eso hay que saber si es verdad que hay sentimientos encontrados, definirlos. Hoy por hoy, en muchos casos hace mucho más bien ayudar a nivel discrecional y no de publicidad.

            El propósito final de este acto, es dar vida, por eso se procura que haya una discreción muy grande.

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